Carolina Vera: “Siempre tuve ganas de vivir” | De sobreviviente a referente del arbitraje en Posadas

✨ De víctima a referente: la historia de Carolina Vera, una vida atravesada por el dolor, el fútbol y la esperanza

📍 Posadas, Misiones | Especial Historias de Vida

✍️ Redacción Eldorado Multimedios Sociedad

En Argentina, miles de niñas y mujeres enfrentan la violencia de género como un obstáculo brutal desde edades tempranas. Pero también, muchas encuentran en la adversidad un motivo para renacer. Ese es el caso de Carolina Vera, árbitra, madre, instructora y una figura respetada en el fútbol posadeño.

Desde los 4 hasta los 11 años, Carolina fue víctima de abusos sexuales sistemáticos por parte de su abuelo y su tío abuelo. Hija de padres alcohólicos, vivió en condiciones extremas, escapando de casa para dormir en plazas y pedir comida a vecinos.

 

🔥 “Me destrozaron la vida, pero yo siempre tuve ganas de vivir”

“Las cosas que te destrozan la vida, esas no se olvidan. Pero también aprendí que no se paga mal con mal”, dice Carolina.

Su historia está marcada por el abandono, la violencia, la vergüenza, y también la fortaleza. Tras años de abusos y silencios, fue enviada al Hogar de Niñas Santa Teresita, donde poco a poco comenzó a reconstruirse.

Allí aprendió oficios, valores, y sobre todo, a amar sin miedo. A los 18 años, salió del hogar con herramientas y sueños. Trabajó, alquiló, y luego incluso volvió a vivir con sus abusadores para cuidar a su abuela enferma. “Aprendí a perdonar, pero no a olvidar”, expresa.

 

⚽ El fútbol como refugio y vocación

Carolina encontró en el fútbol una pasión sanadora. De pequeña miraba los partidos barriales mientras dormía en la calle. Hoy es árbitra formada, integrante del Colegio de Árbitros de la

 

A sus 32 años, Carolina es madre de dos hijos y lidera con su ejemplo. Sus clases en el gimnasio “Activate”, en el barrio Santa Lucía, son espacios de contención y empoderamiento.

 

🙌 Un mensaje claro para todas las mujeres

 

“Hoy se denuncia más, hay más herramientas. Antes se te reían en la cara. Las redes, la información y la educación están cambiando todo”.

 

📣 “La vida me enseñó a confiar en Dios y en mí”

“Lo más difícil no fue sobrevivir, fue aprender a vivir sin miedo. No soy quién para juzgar. Pero sí para enseñar que se puede salir adelante”.

 

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