Este domingo, una jornada de intenso calor en Candelaria, Misiones, terminó de manera inesperada cuando decenas de personas fueron mordidas por pirañas, también conocidas como palometas, en la playa «El Puma». Los bañistas, que habían acudido al lugar para refrescarse, sufrieron ataques sorpresivos mientras disfrutaban de un día de recreación. El incidente generó pánico entre los presentes y obligó a evacuar la playa rápidamente.
El calor extremo que azotó la región durante el fin de semana llevó a muchas personas a buscar alivio en las playas de Candelaria. La playa «El Puma», un punto popular entre los habitantes locales y turistas, estaba llena de bañistas de todas las edades. Sin embargo, lo que comenzó como un día de descanso y diversión, se transformó en una experiencia traumática cuando varios bañistas comenzaron a sentir mordeduras en sus cuerpos mientras se encontraban en el agua.
Las palometas, un tipo de piraña que habita en los ríos de la región, son conocidas por su comportamiento agresivo, especialmente cuando las temperaturas del agua son elevadas o cuando hay poca disponibilidad de alimento. Aunque los ataques a humanos no son comunes, las condiciones climáticas extremas pueden alterar su comportamiento.
Este domingo, las altas temperaturas parecieron activar a estos peces carnívoros, que atacaron a varios bañistas al mismo tiempo. Los testigos describieron escenas de pánico cuando, tras los primeros gritos de alerta, decenas de personas comenzaron a salir del agua con heridas en pies, piernas y manos.
Ada Kruse, una de las testigos del incidente, comentó a El Territorio que los guardavidas de la playa actuaron de inmediato para asistir a las personas heridas. “Los guardavidas hicieron un gran trabajo asistiendo a los bañistas, pero como fueron tantas las personas heridas por las palometas, se quedaron sin insumos, por lo que varios heridos, entre ellos niños y adultos, fueron derivados al hospital local”, explicó.
Los guardavidas, ante la gravedad de la situación, lograron evacuar la playa en pocos minutos. No obstante, debido al número de personas afectadas y la rapidez con la que ocurrieron los ataques, se agotaron rápidamente los recursos médicos disponibles en el lugar. Varios de los heridos presentaban mordeduras profundas, lo que requirió atención médica especializada en el hospital de la zona.
Las autoridades locales confirmaron que decenas de personas fueron atendidas en el hospital de Candelaria con lesiones causadas por las mordeduras de palometas. Aunque la mayoría de las heridas no eran graves, algunas personas, especialmente niños, sufrieron cortes profundos que necesitaron suturas y tratamientos más complejos.
Las familias de los afectados expresaron su preocupación por la falta de insumos médicos en la playa, señalando que los guardavidas no contaban con suficiente material para atender a todos los heridos. Sin embargo, las autoridades destacaron la rápida respuesta del personal de emergencia y el traslado oportuno de los lesionados al hospital.
Las palometas, o pirañas, son peces carnívoros que suelen habitar en ríos y lagos del noreste argentino, incluyendo la provincia de Misiones. Aunque normalmente se alimentan de otros peces y pequeños animales acuáticos, estos ataques a humanos pueden ocurrir bajo ciertas circunstancias.
El incidente en la playa «El Puma» ha puesto en alerta tanto a las autoridades locales como a los bañistas. Ante el riesgo de nuevos ataques, se están evaluando medidas preventivas para proteger a la población y evitar que este tipo de situaciones se repitan. Algunas de las recomendaciones incluyen:
La noticia de los ataques de palometas en la playa «El Puma» ha generado preocupación entre los habitantes de Candelaria y los turistas que frecuentan la zona. Muchos se preguntan si es seguro seguir disfrutando de las playas locales, especialmente durante el verano, cuando las temperaturas elevadas parecen ser un detonante para este tipo de agresiones.
Las autoridades locales han anunciado que, por el momento, la playa «El Puma» permanecerá cerrada mientras se llevan a cabo evaluaciones de seguridad. Además, se ha solicitado la intervención de biólogos marinos y expertos en fauna acuática para estudiar el comportamiento de las palometas en la zona y desarrollar estrategias que minimicen el riesgo de futuros ataques.
El ataque masivo de palometas en Candelaria es un recordatorio de que, aunque los cuerpos de agua son una fuente de recreación y alivio en días calurosos, también pueden presentar peligros. Es fundamental que tanto las autoridades como los bañistas tomen precauciones adicionales para garantizar la seguridad de todos.
En las próximas semanas, se espera que se tomen decisiones respecto a la reapertura de la playa y las nuevas medidas de seguridad que se implementarán. Mientras tanto, las familias afectadas siguen recibiendo atención médica y psicológica, y la comunidad permanece atenta a los avances en la investigación sobre lo sucedido.
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